Empezamos para ello resumiendo lo que había sucedido con la región de lo que hasta principios del siglo III fue el Imperio parto, cuya geografía comprendía las actuales Irán, Irak, Afganistán, Turquía, Siria, Pakistán y Azerbaiyán entre otros países, este imperio había sido fundado en su origen por un Caudillo iraní de origen nómada llamado Arsaces I después de coronarse, para expandir sus tierras.
Los herederos de este hombre tuvieron que enfrentar a los enemigos que tenían en las fronteras y que no eran otros los descendientes de los famosos diádocos y os preguntaréis.
¿Quiénes son estos diádocos?
Los diádocos fueron los grandes generales que se disputaron la herencia del gran Imperio de Alejandro Magno y como no podía ser de otra forma los hijos y nietos de estos se estuvieron pegando entre sí hasta la eternidad. Y es que los partos se lo montaron muy bien y aprovecharon esta situación, así mientras Seleuco II se daba de leches con Ptolomeo III en la frontera, los hombres de Arsaces les hicieron la jugada por el otro lado, de esta forma se acabó consolidando en la región un enorme Imperio que mezclaba la cultura persa con la helénica y que duró 400 años, dominando completamente el comercio de todo el mundo en la ruta de la seda.
Pero en el año 224 después de Cristo, todo eso iba a cambiar, porque es que resulta que las dinastías van y vienen y algunos imperios se mantienen, pero el Imperio parto iba a llegar a su fin lo que no habían conseguido los romanos iba a llegarles por mano de un hombre llamado Ardacher.
Este era el nieto de un gran sacerdote llamado Sasan, y el nombre del abuelo iba a dar origen a una de las dinastías más importantes de la historia de Irán, los sasánidas, así junto con su padre y hermano mayor ardacher comenzó su conquista en la provincia Iraní de Fars.
Aprovechando que el emperador de partía Artaban IV, se estaba enfrentando a su hermano en Mesopotamia, sí, la historia se repetía, sin embargo, el padre de este murió junto con el hermano Así que Ardacher le tocó ascender al trono, así tras una serie de sucesivas victorias en las que los sasánidas derrotaron al propio Artaban, Ardacher acabó por convertirse en señor de toda Persia y ser Coronado como rey de reyes.
Durante los siguientes años las fronteras del nuevo imperio Sasanida, no dejaron de expandirse hacia el norte, este y oeste llegaron a conquistar Antioquía y Siria y como no, también se enfrentaron a los romanos durante muchos años, un ejemplo claro de esto sucedió en nuestro siglo III, pero os lo contamos un poquito más adelante así de nuestros queridos sasánidas nos vamos a ir muy hacia el este, hacia las Islas japonesas, es que allí iba a iniciarse lo que sería una de las edades de oro de la historia japonesa el periodo kofun, este periodo corresponde a la época comprendida entre los años 250 y 538 y su nombre proviene de la expresión tumba antigua ya que por aquellos tiempos Los japoneses empezaron a enterrar a las personas importantes en grandes tumbas.
La verdad es que eran una pasada, en este periodo la sociedad japonesa se fue dividiendo por castas los clanes de guerreros o UJI, los artesanos son los BE los esclavos y resulta que los guerreros fueron cogiendo mucho poder gracias a las mejoras agrícolas y tecnológicas tanto que uno de los clanes guerreros logró dominar la isla de kyushu y gran parte de honshu hasta la llanura de kanto donde se ubicaría la ciudad de Tokio en el futuro.
Este clan fue el famosísimo clan Yamato liderado por Sujin el primer emperador real de la historia japonesa que consiguió unificar por primera vez el país y por seguir con el Pacífico, sabemos que existían poblaciones aborígenes que llegaron desde Samoa sobre el año 1000 antes de Cristo Algo similar a lo que ocurría en el caso de Australia, Así que nos vamos a centrar en otros pueblos que tuvieron organizaciones más complejas y mayor contacto con los pueblos vecinos, Así que nos mudamos otra vez de región, esta vez para caer en un reino del que seguro que muchos nunca habíais oído hablar, pero que fue de Gran importancia en la región y durante el siglo III estaba en pleno apogeo, el reino de Funan.
Este reino de cultura hindú se encontraba en lo que hoy sería Vietnam, Camboya y parte de Tailandia y se puede decir que el primer imperio del sudeste asiático, fue un reino con un vasto territorio y de Gran importancia en la región, además de una importante región comercial que sobre todo hacía negocios con china, su cultura sería base para la posterior cultura de los Jemeres, el grandísimo Imperio que más adelante fundaría la increíble ciudad de Angkor wat.
Ahora sí que sí, volvemos con china, en el anterior articulo lo dejamos con el final de La Dinastía han, el ascenso de cao cao y el inicio del periodo de los tres reinos, y es que a pesar de que fue una fase muy breve y marcó profundamente la cultura china de los siguientes años, dejando un legado que sigue presente a día de hoy, ahora bien, ¿Qué narices ocurrió? pues bueno si recordáis el anterior articulo, veréis que el general cao cao había conseguido hacerse enormemente fuerte en el norte de China, el tío tenía un ejército poderosísimo, y tras haberse demostrado que el emperador Han ya no valía para nada el Imperio se fragmentó en tres reinos, uno era Cao Wei fundado por la dinastía Cao luego estaba Shu Han al sur oeste liderado por Liu Bi un jefe militar que se proclamó emperador de la ya terminada Dinastía han, y finalmente el reino Hu al sureste con Shu al frente entre los tres todos se dieron de leches como si no hubiera mañana.
En el año 208 las tropas del Liu Bi y Sun Quan unieron sus fuerzas para hacer frente a cao cao así dio lugar La batalla de los acantilados rojos en el año 208, una Batalla naval que pudo haber sido una de las más grandes de la historia de la humanidad y que llevó a la derrota de cao cao mediante la quemada sus barcos, tras la derrota del tipo este llegó su hijo Cao pi pero los Wei y los Shu Se volvieron a liar y los mandaron a pique.
Y ahora llega lo inesperado, en el 263 un clan cercano a los cao llamado Sima se hizo tan fuerte que derrotó a los Shu, se volvió contra los cao y finalmente conquistó a los Huk, Asique se fueron todos en un abrir y cerrar de ojos.
El tío fundó así la dinastía allí en occidental y logró unificar el país de nuevo, algo que no iba a durar mucho pero Eso lo veremos en el siguiente articulo, y terminamos volviendo a Europa donde la cosa estaba muy chunga, resulta que tras la muerte del emperador cómodo el Imperio Romano entró en una crisis desmedida que estuvo llena de problemas, baja producción agrícola guerra contra los bárbaros sublevaciones internas faltas de esclavos anarquía militar Y prácticamente cualquier cosa que os podáis imaginar, además, con la última Dinastía Romana de lo que se conoce como, el principado, es decir con La Dinastía severa el papel delos militares en el gobierno del imperio se fue haciendo cada vez más grande, tras el asesinato del emperador Alejandro Severo, el trono de emperador se disputó entre más de 20 desafortunados, ninguno pudo conservarlo mucho tiempo y la mayoría fueron asesinados o muertos en batalla vamos, que los augurios eran malísimos, además con la llegada de los Sasánidas, los romanos vieron él demonio y tuvieron que cambiar muchas cosas para prepararse contra un nuevo y poderoso enemigo, así el Imperio, sasánida del emperador Sapor I se lanzó a la conquista de territorios romanos.
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Y estos vieron como perdían los territorios que en otros tiempos dominaron con tanta facilidad. Eso sí, los sasánidas, no consiguieron su objetivo principal que era una salida al mediterráneo no obstante para suerte de los romanos un importantísimo reformador llegó al imperio a finales de siglo y con él se pudo estabilizar momentáneamente la situación hablamos del emperador Diocleciano que dividió el Imperio entre dos líderes y posteriormente Entre cuatro, fundando lo que se denominó como tetrarquía, eso sí, este sistema no duraría mucho más de 30 años pero también os lo contaremos en el próximo artículo.
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